Susurros y tentaciones: 

Estás en una fiesta en la playa estás mirando a la chica que te gusta, la ves cómo baila, y no sabes si es tu intuición o los deseos de que se fije en ti pero piensas que te coquetea mientras te dedica pequeñas miradas como llamando tu atención, aún no te lo crees y cambias la mirada para disimular tu forma de desearla. Tu distante, sentado a lo lejos te empeñas en conformarte con verla, al volver a buscarla no la encuentras, pero un olor que ya conoces te pega fuerte, mientras un susurro al oído te dice a quién buscas. No te volteas, te limitas a escuchar lo que tiene que decir, y ella en un estilo un poco atrevido comienza a exaltar tus emociones. Te susurra que imagines cómo sería tocarla, que imagines que ella está besando tu cuello mientras acaricia tu abdomen y su mano baja un poco más de tu cintura. Imagina que te besa tu pecho, que recorre cada parte de ti como un deseo absurdo que no puede contener, pero no te deja hacer nada, te dice que te dejes llevar, qué sientas que cierres los ojos y te entregues, es importante que no los abras, que te entregues al momento y que sientas cuánto te desea. Pone su boca sobre tus muslos, aprieta tus glúteos con sus manos, no son besos cualquiera son besos fuertes pero la vez tiernos y cariñosos que te hacen explotar de deseo…

Algo está rozando su cara y lo sabe y le gusta… Y parte de tus entrañas están sobre su pelo, por dentro eres un volcán, la lava se va acumulando, esos besos en tus muslos te van haciendo maniobras en tu cabeza la sientes que penetró dentro de tu mente aún cuando sabes que está agachada frente a ti solo besando tus muslos. Inca sus uñas en tus nalgas pero no la sientes o sí, sí la sientes pero te gusta y le pides más y le pides más y más, si es un sueño no quieres despertar y si es real no quieres que acabe…

Te excita saber que te domina o que se cree realmente que lo hace o que realmente me domina y yo no entiendo cómo, es un momento único, hay personas cerca pero no tan cerca como para que no pueda ser un momento perfecto. Sus manos ahora tocan tu pecho rasgan tu abdomen y con su boca recibes pequeñas mordidas cerca de tus partes, eso te gusta te da miedo sí un poco, pero te gusta y no resistes,es mucho, no dominas tu mente, no sabes cómo llegaste a esto ni remotamente si estás sin ropa o vestido…

Por un momento dejaste de sentir, de sentir su boca en tu piel y eso te asustó, pero solo fue un instante, ese instante en que duró sacar su boca de tu piel para ponerla sobre tus partes inferiores y quieres que sea vulgar y que lo llame por su nombre pero no, prefiere decirle partes inferiores, comienza a acariciar con la punta de su lengua, es como si estuviera recogiendo las gotas de helado que se derraman mientras lo lames, el recorrido de su lengua es como la corriente eléctrica aún tocando una sola parte se corre todo el cuerpo…