Reflexión en contracorriente – “La ley salvaje del hombre por el hombre: Matar o morir”
Sueño con que no haya militares, ni detrás de bastidores, cobardes y malnacidos ambiciosos fabricantes de armas y de guerras en el mundo….
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IrNo soy madre, pero me solidarizo con las elocuentes palabras del nipón Ryoichi Sasakawa que sentencian: “Dichosa la madre costarricense que sabe que su hijo al nacer jamás será soldado”.
El terrorismo y la delincuencia no es posible exterminarlos, pues los fabricantes de armas son los primeros terroristas y delincuentes de cuello blanco, disfrazados en la ONU de garantes de la paz.
Decía el idealista Mahatma Gandhi, o “Alma grande” entre los hindúes:
“Ojo por ojo y el mundo acabará ciego”.
No quiero justificar lo injustificable. El oprobioso comunismo apareció en el orbe, precisamente, producto del resentimiento social inicialmente hacia un poder feudal y luego hacia una depravada ambición de algunos representantes del capitalismo, a lo que historiadores, economizas, politólogos y sociólogos dieron en llamar “neoliberalismo salvaje”.
Hoy compiten salvajemente algunos regímenes de izquierda y de derecha por el primer lugar y record de quién se erige como soberano de la infame e inhumana ley depredadora del hombre por el hombre, y para ello hacen uso desmedido de una fuerza amedrentadora de cuarteles y miliares, o sencillamente de armas tecnológicas muy sofisticadas que tienen al mundo en ascuas….
Son muchos los intereses que se mueven en el mundo que no permiten que la educación de los pueblos logre emanciparnos de tan terrible amenaza a causa de estos infames y genocidas personajes que conforman el Consejo de Seguridad en la ONU. No me canso de decirlo: Son una nueva versión muy disimulada de ratones cuidando queso y zamuros cuidando carne.
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IrMoraleja: Cuan torcida es la educación de un pueblo cuando permite el acto irracional de hacer ricos a unos malnacidos que fabrican armas y por ende las guerras, y, paradójicamente sea el mismo pueblo vestido de esbirro soldado quien lo custodie.
La esperanza es lo último que se pierde y por ende no dejó de enarbolar la bandera de la verdadera paz donde no haya necesidad de armas, donde reine una unión fraternal, sin odios, sin vicios, en un nuevo Edén y paraíso terrenal… lo mencionan las profecías de Nostradamus que ese será ya un estadio eterno y perfecto antes y durante el juicio final. Utopía para muchos que es un imposible, para este servidor una causa para nunca dejar de soñar, de avanzar, de educar…
Hermes Varillas Labrador
#FormandoCiudadanía” & “#ElArcoIrisDeLosNiños (Ven)
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