¿Quieres conseguir terminar tu novela? Aprende este sistema. (2da Parte)


Hoy continuamos con la segunda parte del análisis de este sistema para escribir tu novela.
En el artículo anterior aprendiste la manera de Escribir de Adentro hacia Afuera, desarrollando los puntos clave de la historia en forma de pasos.
Pero, una vez que tienes esto, puedes ir más lejos para brindarle profundidad a tu historia.
La Biblia
Así es como llama Robert McKee a esta parte. Vas a convertir cada unos de los pasos que escribiste en tu resumen, en uno o más párrafos de descripción en momento presente, que narre la escena momento a momento.
Indica de qué van a hablar los personajes pero no escribas diálogo. Crea el subtexto, las intenciones y lo que realmente quiere decir el personaje.
Esto va a hacer mejorar enormemente la calidad de cada escena porque no siempre se necesita diálogo, a veces el mensaje se transmite mejor haciendo que el personaje calle, o ejecute una acción.
De esta manera nos vamos a dar cuenta mucho mejor cuál sería la reacción adecuada en cada caso.
Además nuestros personajes no cometerán el error de “informar al lector,” que sucede cuando el autor quiere que el público sepa algo importante, así que hace que el personaje lo diga.
También la calidad del diálogo mejorará mucho porque se va a decir lo justo para enriquecer la historia.
El diálogo no es una conversación cualquiera, tiene un objetivo. Luego de tener a nuestros personajes callados durante tanto tiempo y entender sus intenciones y todo el subtexto, seguro nos sorprenderán con su ingenio y dirán frases potentes.
La redacción prematura del diálogo mata la creatividad.
Por supuesto, y como cada fase en un proceso creativo, la escritura de la Biblia nos va a llevar a modificar elementos del resumen en pasos y estos a su vez incidirán en otros.
La investigación y la imaginación nunca se detienen, todo seguirá evolucionando y alcanzando niveles mejor elaborados. Es así como debe ser, hay que trabajar duro en esta fase, pero vale la pena. Tienes la estructura de tu historia, puedes hacerla crecer o encogerse, pero es un animal domesticado, hará lo que le digas.
Terminando de escribir la Biblia tendrás ya varios miles de palabras escritas, casi una noveleta o un cuento largo, pero cada momento de la historia debería verse tan vívido como si estuvieras allí.
Tanto el texto (lo que van a decir los personajes, pero sin diálogo), como el subtexto (lo que realmente quieren decir) estarán bien claros en tu cabeza, así como todo el simbolismo, las tramas secundarias y el ritmo.
¡Atento! Evita cometer errores.
Desesperarse e intentar saltar directamente a la Biblia, o sobreanalizar cada escena, buscando un desempeño perfecto, conducirá al bloqueo. Cada fase tiene su momento y tu historia te lo dirá.
¡A Escribir!
En esta fase escribir deberá sentirse como un placer, sin obstáculos ni presiones. Seguro podrás podrás establecerte metas altas de escritura diaria y la motivación de saber que estás avanzando te creará momentum y más motivación.
Llegar de esta forma a la fase del primer borrador te va a permitir concentrarte en el mostrar y no contar, utilizar una acción relevante y una descripción necesaria.
Probablemente continúes haciendo cambios mientras escribes pero ya tienes tu esqueleto argumental, ve a la Biblia y modifica. Incluso creo que bastará con leerla para ajustar curso. Así de bien conocerás la historia llegado este momento.
Todo este proceso es bastante trabajo, soy el primero en reconocerlo. Pero creo que toda obra que nos ocupe meses de nuestras vidas merece ser planificada desde el acercamiento más profesional posible. Un sistema que nos permita terminar nuestra novela.
Esto no significa que los escritores que no planifican se libran de tener que trabajar bien duro. Ellos también tienen lo suyo.
No pienso que un enfoque sea mejor que otro. Solo tiene que ver con escoger cuando quieres pasar el mayor trabajo: al principio o al final. Cada quien es libre de escoger y adaptar esquemas existentes según su propia personalidad.
Espero que te haya resultado útil este artículo. Este es el proceso que estoy siguiendo para la creación de mi primera novela, La Comunidad de los Exiliados.
Si quieres saber de qué va y lo que pienso hacer con ella una vez terminada, pincha aquí