La secuencia.
Amaneció…y estoy entumecida, todo el cuerpo me duele; me abrace tan fuerte a las piernas que me costó volver a mi posición original; pero debo darme prisa, me voy, si, ahora me levanto, y me visto, y ¡Adiós!…
Ya estoy lista para irme de este sitio, absurdo lleno de fantasmas, porque eso que sentí fue eso, un fantasma, un alma penando.Yo que no creía en nada de eso.
Ahora tengo que adivinar, por dónde se sale de esta “ala”, como ellos le dicen, cierro la puerta,y ahora me encuentro en un pasillo amplio y solitario, no sé qué clase de residencia será, no veo a nadie, pero ¿Cómo es posible?… que no hay una secuencia seria en el número de las habitaciones; sigo y tengo que adivinar, ¿Será posible?…ahora, no se, si es a la izquierda o la derecha, pero, voy a tomar a la derecha, y cruzar varias veces, hasta encontrar alguna persona, tengo el número de mi habitación, pero no recuerdo cómo llegué, el tal Bartolo no me dijo nada, no me recomendó nada, todo sigue igual, no me he topado todavía con el ascensor, nada, ¡Que chiste de mal gusto!, y es que parece un secuestro, si, aquí, secuestran a las personas por eso es que tiene tan mala fama, ¿ahora que hago?
Me cansé, voy a recostarme de esta pared, a esperar…me quedo recostada a pensar, a ver si se me ocurre alguna idea, puede que tenga la suerte de que alguien aparezca…ya se, voy a tocar, las puertas de las habitaciones para ver quién me sale.
—¡Toc, toc…Buenos días!
¡Toc toc —gritó más duro —¡BUENOS DIAS!.—insisto..—¡No hay nadie!—¡Toc, toc, buenos días!—Alzo la voz aun..más fuerte—¡BUENOS DÍAS!!!
Tengo ganas de llorar, ¡ya no puedo más…!…
Resbaló por la pared…y me quedo sentada, desplomada en el suelo…
—¡Ay Dios mío!… y ahora ¿QUE HARE?… siento algo muy frío, se me ha nublado la vista…
Me había desmayado de cansancio, y resbalado sobre la pared, estaba en el suelo,sabrá Dios cuánto tiempo, ¿y nadie me vio? cuando abrí los ojos, la angustia regresó y no me dejaba en paz; me costaba pensar, ¡que episodio tan extraño estoy viviendo!, me he cansado demasiado, ahora, creo que lo mejor que puedo hacer es regresar a la habitación, y pedir algo de comida, es lo único que se me ocurre, y haré lo posible por guiarme por esa serie de números, ya descifraré la serie, para encontrar la salida.
¡Que abusadores, ya a este nivel, lo que quiero sinceramente es ir a la policía, y denunciar un secuestro,y todo es muy misterioso, si tengo que desmantelar algo…¡lo haré!..
Abrí los ojos y vi que pasó una camarera, que iba a toda prisa, uniformada con un carrito de limpieza.
Era muy blanca de cabellos cobrizos, tenía ojeras muy oscuras y pronunciadas…
Corrí detrás de ella…
—¡Oiga, oiga…por favor oiga!
Cruzó y se perdió no la pude ver más, se la trago el aire, que se yo.
Me vuelvo a pegar de la pared de otra habitación, me siento a esperar, para ver si pasaba de nuevo…
Vi dos hombres, delgados vestidos muy elegantes, como de etiqueta, murmurando pero no entendía lo que decían…
Yo les hablaba…
—¡Oigan, oigan me prestan un segundo!
Eran blancos como la leche y también con ojeras…pero no volteaban me ignoraban…
—¡Oigan que les pasa! ¡Porque no me saludan!
Siguieron como si nada y se perdieron en el final, como vapor.
Pero…¿porque no me escuchan?…
¡Bueno, busquemos la calma y vamos a ver los seriales con mucha tranquilidad, ¿okey?!…
Lo que me confunde es, que no es una serie ordenada, un número rompe con la secuencia al cruzar, parece que lo hicieron adrede.
¡Que fatalidad!…ahora me estoy arrepintiendo de haber salido de ese cuarto.
¡La única visita que he tenido hasta el momento, es ese fantasma encadenado!…
Vamos a ver, habitación 50-102-204, y esta es la habitación 50-103-204…
y esta es la habitación 50-104-205…ya me he cansado de tanto tocar, y de 50 a 90 que es la mía, válgame Dios, hay bastante, todavía por contar…
Voy a tocar hasta que alguien me abra, debe haber algún huésped, no creo que yo sea la única…
—¡Buenas, toc…toc…!, ¿a ver la manilla abre sin llave?
La puerta abrió.Mi mano y la puerta se fueron solas los noventa grados de apertura; y la habitación está impecable, sola, no hay nadie.
Algo frío y duro me tocó por detrás, volteo…¡NO LO CREO!
—¿Que se le ofrece?…¿Que hace en mi cuarto?…
No puede ser, no me desmayé de nuevo porque me agarré duro de la puerta con la que quedé abrazada y bamboleando, era el espectro que me había traído, el tal Bartolo.
—¡Ah..ah…usted! pero…
—¡Tiene algún problema!
Me repuse.
—¿Cómo que si tengo algún problema, esto es un crimen,lo que ustedes me han hecho,me tienen secuestrada, aquí, no se, como entrar, ni como salir, ustedes son unos abusadores.
—¡No, usted no sabe lo que dice, usted firmó un contrato, yo la puedo ayudar!—me dijo a la vez que ví algo raro en sus ojos, que no entendí.
—¡Quiero hablar con el gerente!
—¡El gerente!…¡El gerente no está!
—¿El señor Otelo no está?
—¡Salió de viaje, viene en dos días, y espera que usted se ponga al día con la deuda, si usted tiene el dinero, el la recibirá, si no lo tiene, entonces, va a esperar a que usted, le pague.
—¡Pero!
—¡Yo me ofrezco, tengo algo de dinero guardado, pero no todo es gratis,y…
—¿QUE EE?…
—¡Es usted muy bonita!
En ese instante perdi los estribos, e intenté irme sobre el siniestro botones que me había conducido hasta ese lugar, el fue rápido y me atajo la mano por la muñeca…y con su voz nasal me advirtió…
—¡Cuídado!…no se porque se me hace, que se vino sin permiso de su mami, y que nadie sabe ¿dónde está la nena?…el siniestro se ríe muy sardónico…¿Quien la vendrá a buscar?…
—¡Los denunciaré!…se los aseguro…
—Yo te puedo ayudar,si me dejas dormir contigo.
—¡Abusador! claro que no.
¡Eso jamás!…
El muy cínico se atreve a correrme…
—¡Salga de mi cuarto y déjeme, quiero mi privacidad!
—¡Imbécil claro que me voy, adiós!—le tire la puerta.
Ahora sí estoy convencida que es una trampa para humanos, sobre todo para mujeres.
Se me acaba de ocurrir una idea, voy a esperar a que vuelva a salir y lo voy a seguir, me quedaré por aquí cerca.
Había un guarda escoba estaba vacío, abrí la puerta y me escondí a esperar que saliera el tuerto siniestro de la habitación, porque tiene que salir en algún momento, ya no se ni que hora es.
Lo cierto es que me está dando mucha hambre y no puedo seguir así.
El condenado sabe, que me está haciendo sufrir.
Pero que puedo inventar para manipularlo, será que le hago creer que estoy dispuesta a colaborar con el.
<<¡Ay nooo quiero volver a mi habitación!>>