Feliz día mujer

Cuando empecé a tener consciencia me di cuenta de las muchas diferencias entre él y yo, el se hacía más alto mientras que yo dejaba de lado las ropas sucias y me comenzaba a gustar las faldas, el comenzaba a ser más fuerte en lo que yo me debilitaba, nuestros intereses de pronto cambiaban como el agua de forma según su contenedor, aun así permanecimos juntos en todo momento, peleábamos cada tanto pero continuamos siendo complementos en una tabla de rompecabezas. En definitiva éramos distintos, pero no por ello nos distanciamos tanto, tenias tus amigos para no hacerme sentir miserable y conocías de mis gustos por las flores regalándome varias de manera instintiva, yo por mi parte te complacía en cada capricho como si fuera una regla trascendental, si querías ese trabajo, te ayudaba a conseguirlo, si alguien te odiaba yo me encargaba de ello.

Pronto dejamos de distanciarnos, nuestros juegos pasaron de las clásicas cosquillas a una caricia un poco traviesa, besarse entre nosotros se volvió un placer indescriptible y cada vez más vicioso, de pronto mi corazón palpitaba entre casa sonrisa que me entregabas en secreto, nuestra amistad de pronto se volvió algo más fuerte. Un vínculo que solo yo conocía al parecer, pues tan pronto descubriste otro cuerpo más bello que el mío te escapaste como si yo fuera una trampa mortal ¿cuántas veces debo decírtelo? Aquella vez que mate a la niña era por que dijo que tu eras su novio. ¿es tan malo que lo haya hecho? Me pediste que me deshiciera de todo lo que te moleste y te dijo propiedad, te asusta que yo haya tomado la vida de tu chica cuando lo había hecho con otras personas. Siendo el caso de que ahora me odias entonces creo que puedo hacer lo que quiera y la verdad agradece que en el día de la mujer ahora tu serás mi regalo.