Cómo superé mi adicción al celular


Hace aproximadamente un mes escribí el artículo Cómo superar la adicción al celular y aunque algunas personas me lo elogiaron a otros le parecía extremadamente complicada la estrategia que proponía. Así que ahora, tratando de simplificar el proceso te voy a contar cómo, en lo personal, logré reducir enormemente las horas que me pasaba frente a mi teléfono: de nueve horas a tres, las necesarias apenas para mi trabajo y saber de familiares y amigos que están lejos, ya que con los que están cerca trato de programar citas o llamadas directas.
Lo primero fue asumir que tenía un problema y asumir que traía consecuencias para mi salud y mi tiempo, que se esfumaba sin hacer nada útil.
Luego definir lo que quiero y lo que tengo, centrarme en mí, en mi familia, en lo que tengo delante y la realidad como principal; y darme cuenta que el teléfono solo es una herramienta para comunicarnos con personas que están lejos y no viceversa. O sea que estaba invirtiendo lo principal.
Al concentrarme en lo que tengo, en el cambio que quiero dar, y las personas que tengo delante como el centro, el uso de mi celular bajó mágicamente seis horas un día y mis metas comenzaron a tomar protagonismo.
Para resumirte, mi adicción no disminuyó al restar horas al teléfono, sino al sumarlas a lo que es realmente importante para mí, mi vida, las personas que tengo en frente y mi realidad.
Esta es mi historia personal, espero que te haya servido y que te leas el artículo Cómo superar la adicción al celular pues allí te doy algunos consejos útiles que se mueven en torno a esta idea.