Cómo superar la adicción al celular


Llamaremos “adicción al teléfono o la computadora” al exceso de tiempo que nos pasamos en juegos, redes sociales (WhatsApp, Telegram y Facebook generalmente), internet o cualquier otra acción no provechosa para los objetivos de nuestra vida. Aunque no lo parezca, superarla no es difícil si te comprometes a responder sinceramente unas preguntas iniciales y cambiar tu actitud respecto al celular.
No te propondré que pongas el teléfono en modo avión o que desinstales las redes sociales (porque las necesitamos); o que les ponga contraseñas y las ocultes (porque luego no querrías desconectarte para no pasar el mismo trabajo). Sino que vamos a hacer en una hoja de papel una estrategia completa para enfocarnos en nuestra vida personal, esa que se está viendo amenazada por el uso indiscriminado de la tecnología.
En resumen la estrategia consiste en 3 pasos:
– Cambiar tu actitud con respecto al teléfono (conociendo su verdadera utilidad).
– Realizar algunas acciones básicas que te propondremos para separarte de él.
– Sumar algunos hábitos y acciones nuevas y provechosas para tu vida.
#1 Cambia tu actitud con respecto al teléfono:
Escribe: ¿Por qué debo dejar mi adicción al celular? Ser consiente del motivo por el cuál luchar te dará la motivación suficiente, aunque te advierto que será fácil. Visualiza la meta, cómo quieres ser.
Una vez identificado el por qué hacerlo, anota: ¿Por qué me paso tanto tiempo frente a la pantalla? en forma de una lista de aplicaciones, define cuáles son importantes y cuáles no.
Déjame decirte que para la mayoría de las personas lo normal es conectarse dos o tres veces al día por corto tiempo.
Ahora bien, definamos: ¿Qué es el celular? Ejemplo:
“Es una herramienta para comunicarse y en ocasiones para trabajar o hacer negocios” y NO para desperdiciar tiempo excesivo en él.
Esta afirmación o una parecida realizada por ti te ayudará a la superación definitiva de la adicción, pues comprenderás el verdadero uso del teléfono.
# 2 Algunas acciones sencillas para alejarte del celular
Antes de llenar el vacío de todo ese tiempo que hasta ahora te pasas frente al teléfono, tablet o PC con hábitos que son importantes para ti, primero debemos separarnos de él, para, de acuerdo a la afirmación realizada en el párrafo anterior, le des el lugar que le toca al celular.
– Desactiva todas las notificaciones: para que no te estén recordando el día entero que existen. Eso incluye las redes sociales (WhatsApp, Telegram, Facebook, etc). Elige un horario para responder todos los mensajes.
– Responde con mensajes largos: ¿Recuerdas que cuando solo nos comunicábamos por e-mails nos pasábamos menos tiempo frente a la computadora? Pues realiza mensaje largos o auxíliate de los mensajes de voz para evitar esas largas conversaciones siempre que lo desees.
– Haz una sola cosa a la vez: ahora que definiste cuáles son las aplicaciones importantes y cuáles no, concéntrate en solo una a la vez y no hagas varias simultáneamente para no perder el control del tiempo.
– Usa pocas redes sociales: no recomiendo más de tres o cuanto más cuatro.
– Crea un horario: en caso de ser lo suficientemente disciplinado puedes hacer un horario para conectarte o jugar.
– Cuando te des cuenta que te has pasado en tiempo, deja de usarlo: no te enojes contigo mismo, solo desconéctate y mantén el mismo plan.
– Desactiva los datos móviles: Cuando no estés utilizando el celular, desactiva el internet y crea una pequeña barrera que te dará más tranquilidad.
– Desinstala los juegos u otras aplicaciones que no sean importantes: si sabes que te excedes en aplicaciones no importantes, que no te tiemble la mano quitarlas.
– Deja el teléfono en casa cuando no haya necesidad de llevarlo: siempre que puedas hazlo, así te obligarás a sociabilizar y concentrarte en el ambiente.
– No te despiertes con el teléfono en la mano: Si usar el teléfono es lo primero que haces en el día lo más probable es que no te despegues que de él. Así que retarda lo más posible ese momento al principio de esta estrategia. De ser posible, que tampoco sea lo último que hagas antes de dormir. Esto además reducir su uso, te ayudará a conciliar mejor el sueño.
– Proponte pasar 24 horas sin usar el teléfono: si no lo logras por lo menos será un avance.
– No lo lleves al baño: en su lugar lleva papel y lápiz y ponte a organizar las tareas del día o las metas. O simplemente lee una revista.
– Estudia por qué o quién te conectas tanto y piensa si vale la pena.
– No automatices más tareas: Hoy casi todo lo hacemos en el cel o en la PC; así que intenta hacer las cosas más tradicionales mientras sea factible.
– Lo más importante: recuerda su uso y cuando te salgas de él, desconéctate.
#3 Suma actividades nuevas beneficiosas
Suma nuevas acciones beneficiosas a tu vida de acuerdo a tus objetivos (y si no los tienes defínelos ahora que tienes más tiempo libre). Sal con amigos y concéntrate en el ambiente, enumera en una hoja las actividades a realizar en el día para que no las pierdas o las olvides y no te sientas aburrido.
Consigue un trabajo o ponte a trabajar más en tus proyectos. Dale seriedad a tu vida y pasa tiempo con la familia. Promueve acciones interesantes y concéntrate en tus metas, tus seres queridos. Aprende una nueva habilidad (cantar, bailar, dibujar) y haz ejercicios.
En fin, comienza una nueva vida conociendo esta vez la verdadera utilidad del celular, ese que se había convertido en un problema.
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