Capítulo 4: Descifrando el misterio en aquella chica. Las Caras del Destino
Aquel día, me desperté en medio de la noche, tras tener un sueño muy extraño, más bien era una pesadilla. Todo era acerca del paradero de mi padre, resulta y acontece, que estaba supuestamente enterrado en el cementerio de la ciudad. Su lápida decía: “Muerto- mayo 2021”, tras leer eso, la pesadilla terminó, aunque creí que era falsa, ya que estamos en marzo, pero algo me decía que era todo verdad. Sudando frío por los nervios, me levanté, encendí mi lámpara de escritorio, me senté, tomé el cuaderno, empecé a leer cada página. Llegué a la conclusión, que no era obra del cuaderno, si no que tal vez, era una predicción del futuro.
Al día siguiente, caminé hasta la cocina, creyendo ver a mi papá. Pero no, sólo vi a mi mamá llorando de nuevo. Le pregunté porqué está así, y me responde igual que ayer, que no tenía nada. Buscando por entre la casa, encontré una carta. Era para mi mamá, estaba sellada con sello de cera, para que parezca antiguo. Igual que las cartas manuscritas de la época del siglo XIX (19). Quise intentar abrirla, pero luego dije que no sería correcto, mejor que la abra mi mamá.
Lo que, si hice, fue comprobar si era para ella. Por lo visto si, decía dirección exacta y todo. Se la mostré, para decirle que le llegó la carta, para que la leyera, no le quise ni preguntar que decía, porque algo me decía, que ese es un asunto que en el que no debía meterme.
Me fui a clases, y de repente en el camino, sentí un fuerte dolor de cabeza, tan grande, que empecé a brotar sangre de mi nariz, las venas de mis ojos, frente y cuello se me brotaron, mientras pasaba eso, me empezaron a extrañas visiones, todas relacionados con mi sueño. Al terminar el efecto, muchas de las personas se me quedaron viendo, para tratar de ayudarme o algo, y entonces, al terminar de recuperar la conciencia, el dolor me hizo hasta agacharme poniendo mis manos en mi frente, e incluso grité un poco, me levanté, Saqué un paño de mi bolso, me limpié la sangre de la nariz, las lágrimas por brotar de mis ojos, mis lentes, y luego seguí mi camino, como si no hubiera pasado nada.
Sentado en los bancos de la parada, me puse a tratar de recordar y descifrar lo que sucedió en mi cabeza, llegué a la conclusión, de que posiblemente eran recuerdos. En las visiones se notaba claramente mis padres, mis amigos… Pero daban objetos, personas y palabras clave. Todo relacionado específicamente con: La fecha, mis compañeros de clase, lugares, y más que todo conmigo mismo.
Ya dentro del autobús, saqué un cuaderno, (no el Tempo. -Nikki). Y empecé a organizarlos todos, en una lista:
OBJETOS: 1#. Un cuaderno.
2#. Un pupitre.
3# y último. Un calendario.
COMPAÑEROS DE CLASE: 1#. Shina, la misteriosa chica.
2#. Midori
3#. Mi profesor de biología.
4# y último. Mi mamá.
LUGARES: 1#. Mi casa
2#. Mi universidad
3#. El parque.
Y listo, esa es toda la lista. Ahora, ¿cómo todo esto está entrelazado de alguna manera con la desaparición de mi padre, que intentaran asesinarme, la misteriosa carta y con Shina?, ya lo veremos a continuación.
Empecé primero por mi universidad, si iba de camino para allá, ahorraría tiempo. Llegué buscando a Shina. La busqué por el cafetín, como se notaba que leía mucho, pensé que estaba en la biblioteca, no estaba, fui al club de lectura de la universidad, y allí tampoco. Se me estaban acabando las buenas opciones, y ya casi tenía que entrar a clases. Fui hasta allá a verla, entré en mi salón, ella era mi compañera de clase, pero tal vez no compartíamos esta misma clase en la que yo estaba, al parecer sólo compartimos una clase los jueves, y hoy era viernes. Al final del día, no vi a la chica por ningún lado, pero sí a Midori. Rápidamente, corrí hasta ella: ¡Midori!
Midori: ¡Kyouto! ¿Qué sucede?
Yo: Midori, tal vez tú estés más cuerda que yo, anoche tuve un extraño sueño, en el que daba el paradero de mi padre exacto, su lápida decía “Muerto- mayo 2021”, ¿será una predicción del futuro o qué?
Midori, perpleja y asombrada por lo escuchado, dice: Kyouto, de verdad estamos en mayo.
Yo aterrado: ¿Mayo? ¡Yo juraba que estábamos en marzo!
Midori muerta del miedo: Me estás dando miedo…- Al ella decir eso, me despedí, le di las gracias, y me fui. A casa, otro lugar donde investigar. Apenas llegué, fui a buscar a mi mamá, al encontrarla, le dije: ¡Mamá! Quiero que me digas la verdad. ¿Estamos en marzo o en mayo?
Mamá: Mayo hijo, ¿por? – Apenas lo dijo, fui corriendo al calendario de la cocina, ya que, en los recuerdos que tuve, estaba un calendario, busqué marzo. Busqué esta misma semana dos meses antes, tres días antes de hoy, había una anotación. Cómo indicando que ese día, teníamos que estar los tres, en algún sitio, que era el parque.
Al leerlo bien, pregunté a mi mamá: ¿Qué hicimos este día en el parque? No recuerdo bien.
Mamá: Hijo, ese día sólo fuimos al parque con tu papá, a tomar un helado y a pasar el día distinto. Pero desde ese día, no hemos vuelto a verlo.
Yo: Ok, mamá. De acuerdo. Debe ser porque casi ni duermo, tengo mucha tarea, que estoy empezando a perder la memoria y la noción del tiempo. Gracias mamá, me voy a hacer mi tarea.
Subí a mi cuarto, encendí mi computadora, y me puse a hacer mi tarea. Como no la había prendido en muchos días, comprobé y la fecha y hora, y sí. Estábamos en mayo. Chequeando mi tarea encontré el cuaderno que salía en mis recuerdos, era mío, y no el “tempo-nikki”, tomé y busqué todo lo anotado aquel día martes dieciséis de marzo, y era el recordatorio de la ida al parque. Y justamente era de la clase de biología. Significa, que la semana que viene, tenía que ir a hablar con mi profesor de ésa precisa materia. Ya que los sábados, tenía clases, pero no me veía con ese mismo profesor. Sólo hasta el mediodía, por lo que tenía toda la tarde desocupada, para ir al parque, y descubrir pistas de este misterio.
Al día siguiente, ya desayunado, e ido a clases, aprovechando mi estancia en la universidad, aproveché de buscar a Shina, nuevamente no di con ella, una vez dadas las 12:00pm, fui directamente al parque. Apenas llegué, vi el mapa, examinándolo no hallaba exactamente en qué lugar se desarrollaba mi recuerdo, no me quedó de otra, que caminar por el lentamente, para que de alguna forma recupere mi memoria.
Hasta que di con el lugar, en un árbol de cerezo, me senté sobre la banca que estaba al lado, junto a la laguna. Pensando, noté que, en el piso, había marcas de sangre ya vieja, me agaché a verlas, y no parecía de alguien conocido, sino de alguna especie de animal, luego examinando bien mi recuerdo, noté que, en esa misma banca, nos sentamos mi familia y yo aquel día, y por la parte de atrás, tiene unos cortes, comprobé, y ahí estaban. Detallando con más claridad todo, noté que, en una de las esquinas, había una bolsita de fieltro pequeña atada, la tomé, tenía una etiqueta en la parte trasera, diciendo: “Para Kyouto”, la abrí, y tenía un pendrive dentro, me lo guardé en el bolsillo, y me fui a mi casa.
Lo conecté a mi computadora, y tenía un bloc de notas, y un video. El bloc de notas decía: “Toriyama Kyouto, un chico muy inteligente, pues te tengo esto, el sueño que tuviste, no fue ninguna predicción del futuro, fue un recuerdo. O sea, algo que hiciste en “piloto automático”. De verdad tu padre si falleció este mes, di contigo escribiéndote esto, y siguiéndote como una sombra. Tu nunca te diste cuenta de mí, yo sé cuándo atacar. Eso ya sería todo, espero te haya servido de algo.
Atte.: Una amiga tuya.”
Al terminar de leerlo, cegado por la ira, el odio, los celos, y la apatía… Pensé que me habían tomado el pelo, cuando en realidad no era así. Antes de ver el video fui a ver a mi mamá, la cual estaba dormida, y tenía un montón de pañuelos desechables tirados por el piso, por sus lágrimas, y encontré en su mesa de noche, la carta que vi esta mañana. Y me puse a leerla, con lágrimas en los ojos, el corazón latiendo como el de un caballo de carreras y con manos temblorosas, la carta decía: “Estimada Sra. Toriyama, lamentamos mucho informarle, que usted tiene una orden de arresto, como sospechosa del asesinato del Sr. Toriyama Reiji, su esposo, y su hijo Toriyama Kyouto, queda puesto bajo custodia del gobierno japonés, por ser todavía menor de edad. (En Japón la mayoría de edad es a partir de los 20 años.) Será trasladado a una especie de internado mientras resolvemos todo esto. Usted debe presentarse en la estación de policía más cercana en menos de 72 horas, o no tendremos alternativa de irrumpir en su casa y arrestarla a la fuerza. Sin nada más que agregar, aquí termina esta carta.
Atte: Capitán Fuji Reiko. “
Una vez leída, puse la carta dónde y cómo la encontré, y subí a mi cuarto, sabía que algo no andaba bien. Y pues, para terminar de descifrar todo esto… Vi el video, lo cual, era algo increíble, era la misma silueta que me intentó matar, pero sin su túnica, teniendo a mi papá secuestrado, con cicatrices en todo el cuerpo, y diciendo: “Mira lo que le hago a tu querido padre, todo por venganza.” Y le voló el cráneo con una escopeta, y esto me terminó, de romper la barrera de ira, para intentar deshacerme de todo eso, grité lo más fuerte que pude, e intenté no romper la evidencia, todo esto indica, que ella fue la que me intentó asesinar, ese día jueves
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Muy bueno sigue así!
Gracias leer el capítulo