A la vuelta de un corazón roto, siempre hay alguien que cree en los reyes magos
“Hoy termine de romperme, ahora mis pedazos están esparcidos por todos lados, sé que tarde o temprano los juntaré, siempre lo hago, al final yo puedo con todo. Es solo que esta vez, pensé que no necesitaría hacerlo, porque él iba a estar ahí, porque yo confié ciegamente en que, si lo haría, de verdad pensé que había encontrado mi lugar seguro, de verdad creí que ya podía descansar, pero me equivoque. Duele mucho saber que no fuiste lo suficientemente importante como para que esa persona intentara ser mejor por ti, duele estar seguro de que pase lo que pase esa persona no va a hacer nada para recuperarte, pero lo que duele mas es saber que tu si lo harías. Ahora solo me obligo a mirar por la ventana y pensar mañana será otro día, y si se acumulan muchos de esos días, hará el tiempo suficiente como para que esa persona solo sea un recuerdo, uno lindo, porque no me apetece quedarme con los malos.
Hasta que eso ocurra me torturaré pensando en que hice mal, luego en que hicimos mal, y quizás mas tarde me de cuenta de que todo se fue a la mierda porque así tenía que ser, que ya vendrá algo mejor, pero a quien quiero engañar, no voy a creer eso por mucho que lo repita, al igual que los recuerdos y los besos no pueden embotellarse, que algo se termine no es siempre un sinónimo de que va a llegar algo mejor. Que una relación termine es solo un sinónimo para vacío, si, vacío en las fotos en la mesa, en la cama, en todos los lugares donde se supone debería estar esa persona. Luego llega el muro que te hace pensar que todo va genial cuando realmente esta más hecha mierda que antes. Pensar que mañana será mejor es lo que hace que los estúpidos como yo nos levantemos, te cuento un secreto mañana no será mejor, solo más soportable”
Esa es la perspectiva mas gris, la que muchos tenemos en el momento exacto en que nos rompen el cerrazón, pero exactamente como pasa cuando somos niños y se nos revela que santa y los reyes magos no existen, terminamos superándolo. Con cada pedazo de nuestro cerrazón que se rompe, crecemos, aprendemos y saben cual es la mejor parte, que siempre podemos empezar de nuevo, aunque a veces nos parezca que no es posible. Todo es posible solo no dejes de creer en ti, porque los estas haciendo genial, estoy completamente segura de eso. JA
